Los malos olores de la basura, provenientes dentro y fuera del hogar, son perjudiciales para la salud. Las actividades industriales realizadas en las grandes ciudades, provocan la mala calidad del aire y contaminación odorífera.
El desconocimiento de este tipo de contaminación deja expuesta a la población. Tener conocimiento de los efectos que causa los malos olores en la salud, ayuda a la prevención de accidentes en el hogar.
La contaminación por malos olores, conocida como odorífera, se da cuando olores de la basura invaden el ambiente y hacen incómoda la convivencia en él. El convivio con este tipo de olores afecta la salud.
En las zonas urbanas se realizan actividades industriales que generan contaminación odorífera. La falta de mantenimiento al drenaje también contribuye a la contaminación por malos olores.
No contar con una cultura de gestión de los residuos en el hogar, ocasiona que la basura acumulada en el cesto emane olores hediondos. Estos invaden los espacios del hogar haciendo incómoda la realización de actividades.
La exposición prolongada a este tipo de ambiente, ocasiona que nos acostumbremos a los malos olores. Aunque ya no percibamos el aroma de la basura, eso no quiere decir que no sea dañina.
Además, los malos olores en las zonas residenciales causados por el estancamiento de las alcantarillas, mal gestión de los residuos, la deficiencia del drenaje y las actividades industriales de la zona, bajan un 15% el valor de las viviendas.
Descubre qué produce el mal olor de la basura.
La OMS define como un mal efecto de la salud a cualquier experiencia que provoque malestar a nivel físico y emocional. Los efectos físicos de la contaminación odorífera son mareos, dolor de cabeza, complicaciones respiratorias y alteraciones psicológicas.
El vivir en una zona con actividades generadoras de malos olores, provoca entre su población insomnio, mal humor, irritación en mucosa, estrés, náuseas, vómito y reacciones neurotóxicas.
En los hogares, la contaminación odorífera pone en riesgo la salud de los niños menores de 5 años y adultos mayores, quienes son más susceptibles a los malestares causados por los malos olores de la basura.
Las empresas también se ven afectadas por este tipo de contaminación. Aquellas empresas cuya actividad industrial implica la emanación de malos olores, proveen a sus empleados del equipo necesario para que no afecte su productividad.
Si presentas alguno de estos malestares, observa tu entorno. Identifica el origen de los malos olores. La contaminación odorífera puede originarse dentro y fuera de nuestro hogar. La prevención puede mejorar la calidad de vida.
Para evitar la proliferación de malos olores en el hogar, hay que revisar periódicamente los filtros de las campanas extractoras, los botes sinfónicos y los shunts.
En el caso de las campanas extractoras, hay que limpiar frecuentemente los filtros y si es necesario, sustituirlos. Los shunts no deben ser obstruidos. Y los botes sifónicos deben tener el correcto nivel de agua y ser limpiados de vez en cuando.
Se debe evitar la acumulación de basura en el cesto de la casa. Para eliminar los olores dentro del hogar, se debe establecer días fijos para la recolecta y mantener un protocolo de desecho (lo que se tira dentro y lo que se debe tirar fuera).
No basta con solo enmascarar el mal olor en el hogar con ambientadores, ni tampoco con eliminar la materia que lo origina. Los gases que emanan los residuos, permanecen en el ambiente.
El uso de inhibidores o eliminadores de olores, son herramientas eficaces contra la contaminación odorífera ya que, a diferencia de los ambientadores, no enmascaran los malos olores, sino que los desintegran.
Si en el área en que resides realizan actividades que generen malos olores, la recomendación es el aislamiento de tu casa. Tanto el cierre de las ventanas y sellados entre materiales, es fundamental para evitar los olores externos.
En caso de que la generación de malos olores en tu zona residencial sea insoportable al punto de que algunos residentes presenten síntomas de intoxicación o malestares crónicos, hay que reportar a las autoridades correspondientes.
Para definir si la emanación de estos olores está en niveles de riesgo, se pueden usar dos métodos: olfatometría dinámica e inmisión del olor. Así se determina el modo de tratamiento y las medidas para reducir su impacto en la población.
Conocer sobre la contaminación odorífera permite identificar los factores de riesgos que nos rodean, los cuales afectan la salud. Habitar un ambiente contaminado por malos olores, disminuye la calidad de vida de los residentes.
Infórmate más sobre el tema, conoce otras alternativas para evitar la contaminación odorífera y las empresas que manejan métodos para eliminar los gases de los residuos generados por las actividades humanas.
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